EL ESPÍA
¡Ay mi amor por favor! Como les gusta a los kirchneristas decir mentiras, es algo natural en ellos. Cuando los tienen contra las cuerdas por las cosas que hacen mal buscan desviar la mirada pública y empiezan a inventar historias de espías.
Ahora resulta que por orden de Mauricio, la Dirección Nacional de Migraciones, controlaba la entrada y salida del país de un montón de políticos, jueces, futbolistas, jugadores de bochas y técnicos en aire acondicionado relacionados directamente con el kirchnerismo. Entre los nombres más fulgurantes de esta “nueva trama de espionaje 3.0” figuran: Cristina Kirchner y sus hijos, Hugo y Pablo Moyano, Alejandra Gils Carbó, Santiago Maldonado, Ricado Lorenzetti y Juan Carlos Maqueda entre otros.
El Nacho, mi marido peronista, insiste en que todo esto es verdad porque los macristas no tienen escrúpulos a la hora de mentir, engañar y estafar. Sin embargo con la Thelma somos un poco más coherentes y creemos que todo esto no es más que el producto de una mente retorcida. Mauricio sería incapaz de hacer algo así, por más que su frase: “si me pongo loco les puedo hacer mucho daño” todavía resuene en la cabeza de algunos trasnochados.
La Thelma cree que algo así sólo pudo haber sido guionado y escrito por alguien con experiencia en novelas de misterio y espionaje, y con un pasado montonero, como John Le Carré, Ian Fleming, John Katzenbach o Fernando Iglesias. Aunque todos sabemos que Fernando no es es incapaz de escribir algo así.
