ALBERTO TE VACUNA
¡Por favor mi amor, por favor! El momento que tanto temíamos por fin llegó, con la Thelma pensábamos que sólo era otro momento de promesas incumplidas peronistas como siempre, pero esta vez no fue así.
Cuando vimos que el avión aterrizaba y que empezaban a bajar el cargamento de vacunas, entendimos que cualquier cosa que haga Maurico ahora es inútil. Por más que logre la Pobreza 0, por más que llegue la lluvia de inversiones, o por más que la Fundación FIFA haga un partido benéfico en honor a los jugadores de Boca, nada va a poder opacar este hito en kirchenerista.
Para el Nacho, mi marido peronista, Mauricio va a ser recordado como el presidente que nada hizo en 4 años, como el Ingeniero que se puso al revés los guantes de obra, como el mandatario que no sabía leer ni hablar, y como el hombre que no luchó contra una pandemia. Dice que Mauricio es casi tan inútil como el funcionario uruguayo que rechazó por mail la vacuna de Pfizer.
Nosotras no estamos convecidas de que la historia lo vaya a recordar así, sobra decir que para nosotras es, y va a seguir siendo, el mejor estadista de los últimos 50 años. Pero bueno, cuando al negro kirchnerista se le mete algo en la cabeza no se lo podés sacar.
La Thelma y yo tenemos dudas de que verdaderamente hayan llegado las vacunas hoy. Pensamos que puede ser una treta peronista, quizás no sea la Sputnik V la que llegó sino un placebo, que no sólo no lucha contra el virus sino que te convierte en peronista-comunista en un abrir y cerrar de ojos, o simplemente te envenena, como denunció oportunamente Lilita.
Ojalá nos equivoquemos y no terminen todos siendo adoctrinados via intramuscular por un gobierno que busca cualquier motivo para perpetuarse en el poder y evitar que Cristina termine juzgada y presa. Por lo pronto, el miedo a que Alberto nos vacune (literalmente) se hace cada día más grande.
Desde JxC queremos desearles una feliz navidad, ahora que todavía pueden pensar con claridad, con objetividad y con independencia de poderes. Porque cuando ese líquido ingrese a su cuerpo van a perder toda voluntad de ver lo bueno que Mauricio nos dejó para la posteridad.
¡Felíz Navidad, negro! ¡Y Felíz año nuevo!
