ALGO HUELE MAL
¡Ay mi amor por favor! Ahora resulta que todos tenían los teléfonos pinchados y eran espiados, ni que fueran tan importantes. Tuvo que salir Hernancito Lombardi a decir que algo huele mal con todo esto.
Si Marcelo Tinelli no hubiera salido a hacer leña del árbol caído con ese tweet tan mal intencionado, diciendo “Te escuchaban los teléfonos, te leían los mails, te apretaban con la AFIP», nadie hubiera salido a tener que defender el buen nombre de Mauricio.
Pero sin embargo Lombardi tuvo que salir a arrojar un manto de verdad, “la crisis se está profundizando y cuando estas cosas pasan, la economía se pone insostenible. Ahí aparecen las bombas de distracción. Acá hay elementos de distracción para que discutamos otra cosa, pero como la crisis es tan fuerte, ese objetivo no se consigue. Entonces aparece Tinelli, pueden aparecer mercenarios de todo tipo, a los que les dicen ‘hablá de esto para distraer la atención de lo que nos pasa’”, y tiene toda la razón del mundo.
Todos sabemos que el kirchnerismo importó el coronavirus desde China para poder controlarnos a todos, y la excusa de la vacuna es para implantarnos un chip y saber lo que pensamos y lavarnos el cerebro. Se robaron todo.