¡Ay mi amor por favor! Con la Thelma estábamos disfrutando de un merecido descanso alejadas de las luces de los teatros, la televisión y la fama. Solamente nos ocupamos…
¡Ay mi amor! El mundo está sufriendo por los fantasmas de la guerra otra vez y con la Thelma nos devanamos los sesos pensando en cómo ayudar. Primero pensamos…
¡Por favor mi amor, por favor! ¿Hasta cuando vamos a seguir permitiendo que se avasallen nuestros derechos, que se roben nuestra libertad, que nos acusen falsamente de hacer cosas…
¡Ay mi amor! Que felicidad teníamos con el Thelma el otro día en Dolores. Ver toda esa gente apoyando a Mauricio para que no se sienta solo y desamparado…